El incendio se originó aparentemente por la explosión de un televisor, consumiendo una vivienda, y propagándose a una segunda, donde funcionaba un kiosco muchos años atrás.

El incendio se originó en un predio donde se alquilan precarias casillas, sobre calle Almafuerte al 1200, esquina con Forgacs.

Las llamas se iniciaron en una vivienda de madera donde alquilaban una mujer de apellido Maciel junto a su hija de 10 años, la cual comentó a personal policial que un televisor habría tenido un desperfecto eléctrico.

Esto generó el fuego que se propagó a una vivienda lindera del mismo predio, donde muchos años atrás funcionaba un kiosco.

Las pérdidas fueron totales en ambas viviendas, y la mujer junto a su hija, fueron hospitalizadas siendo dejadas en observación a causa de la inhalación de monóxido.