El conflicto gremial que tuvo en vilo a esta empresa mayorista con el sindicato de Camioneros entre marzo y abril pasado tuvo su conclusión en dos ámbitos; el laboral y el juicial.

En el primer ámbito la Dirección de Relaciones con el Trabajo del ministerio de Trabajo de Nación resolvió que los empleados del depósito de esta firma debían mantenerse en la órbita del Centro de Empleados de Comercio, por lo que no fueron encuadrados en el Sindicato de Camioneros como se reclamaba en aquella protesta.

Asimismo la conclusión judicial de algunos incidentes durante la protesta, fue una causa judicial por “amenazas” que denunció el gerente de la firma Maxiconsumo, Marcelo Hernán Lynch, contra el representante del sindicato de Camioneros, Cristian Sosa.

El juez de instrucción Daniel Cesari Hernández con anuencia de las partes finalmente concluyó este proceso enviándolo a mediación al entender que fue “una cuestión de naturaleza gremial”.

A pesar del acuerdo de las partes, la fiscal Laura Urquiza señaló al sindicato de Camioneros como un sector gremial en el que “se naturaliza como modo de buscar su cometido e imponer su actuación, la aplicación de prácticas que no se condicen con un Estado de Derecho”.

El juez consideró apartarse de ese razonamiento ya que fue una conducta personal del individuo denunciado “y no por un gremio”, aunque no se precisó otro episodio delictivo en esa misma protesta como indicó la valoración de la fiscal.