La decisión sorprende de parte del municipio de Río Grande buscando solución en una alternativa ya descartada en el único estudio realizado en el lugar por parte de Recursos Hídricos de la provincia. Es a esta área precisamente que se le pide autorización para perforar y extraer agua en las napas subterráneas, lo que ya fue desestimado por el potencial desertificador que tenía una medida de esas características.

A una semana del encuentro en el Concejo Deliberante de Río Grande las instituciones responsables de los ciudadanos parecen mas centradas en el chicaneo político que en avanzar en una solución concreta.

Es en esta oportunidad en el caso del municipio de Río Grande desde el cual hoy se informó que el director de Obras Sanitarias, Cristian Pereyra, confirmó el pedido a Recursos Hídricos de la provincia de un permiso para perforar en la laguna seca, “corresponde que Recursos Hídricos que son el ente de contralor nos autoricen a avanzar en esta propuesta y poder continuar con el proyecto que el Municipio estará preparando, a los efectos de solucionar el problema que produce esa laguna”, dijo respecto del polvillo que invade los barrios de la zona.

Pero en las declaraciones del funcionario surge que “la intención es realizar una perforación para determinar las distintas capas del suelo, el material que las constituye, para conocer a qué profundidad se encuentra el agua y cuál es el caudal que podríamos extraer de allí”, detalló.

Resulta alarmante la propuesta, tomando en cuenta que en la reunión realizada la semana pasada en el Concejo Deliberante, un técnico de Recursos Hidricos expuso sobre un estudio realizado en la zona desestima esa posibilidad, y con fundamento científico.

El profesional, ante concejales y los mismos funcionarios municipales, aseguró que la perforación y extracción de agua de las napas tiene un potencial aumento de la desertificación en la zona cuando las napas bajen de nivel, e incluso lleguen a agotarse.

Ese estudio nunca fue enviado formalmente al municipio, pero sus conclusiones fueron conocidas en ese encuentro, lo que llama poderosamente la atención de cual es realmente “el juego” de los funcionarios de ambos lados, Municipio y Gobierno, cuando hay una cuestión sanitaria urgente de los vecinos en el medio.