Tras los violentos incidentes en la sede Río Grande de la UOCRA y el ataque mafioso contra la casa particular de Pablo Gordillo, los trabajadores de la construcción vuelven a organizarse con miras a sanear la conducción sindical del gremio.

 

Este miércoles se volvió a llevar a cabo un encuentro en el cual los trabajadores acordaron comenzar a trabajar para conocer la real situación del sindicato, “del cual desconocemos totalmente en que situación se encuentra”, dijo Pablo Gordillo en referencia a que siquiera cuentan con información referente a la próxima convocatoria electoral.

 

Asimismo los trabajadores dijeron tener un total desconocimiento e información desde la conducción respecto a una eventual intervención del sindicato en razón de los gravísimos incidentes ocurridos la semana pasada.