La Cámara de Comercio de Río Grande fue uno de los pocos sectores sociales que no adhirió activamente a la medida de fuerza provincial, y los grandes centros de consumo como supermercados se encuentran abiertos pero con escasa concurriencia en sus locales.
Esto asimismo lo desalienta la protesta que lleva adelante en las puertas de cada supermercado el Centro de Empleados de Comercio que si bien no impide el ingreso, busca concientizar a los consumidores a “no comprar en apoyo al día de reclamo”.
Los salones de venta presentan una escasa presencia de clientes, dado que además no se pueden ingresar en vehículo a los estacionamientos.