Un contrasentido –uno más- se dio en el marco de las medidas sanitarias que esta tarde de sábado tuvieron la protesta del 22M en contra de las mismas en la Plaza de las Américas.
La convocatoria que tuvo lugar a las 17 horas tuvo expresiones desde distintos sectores sociales que llegadas las 18 horas, con el inicio del horario de restricción y la caída del sol, fue teniendo una desconcentración gradual.
Cerca de las 18.30 ya estaban en pleno funcionamiento todos los controles policiales en la ciudad, puntualmente el control sobre calle Santa Fé y otro sobre San Martín y Córdoba, a pocos metros de la Plaza de las Américas.
En tanto en la plazoleta quedaron conversando en el lugar un grupo de 20 manifestantes aproximadamente, los que constituyen el núcleo “duro” del reclamo contra la cuarentena y el confinamiento sanitario, quienes aún a sabiendas del incumplimiento del DNU –que consideran inconstitucional- permanecían en el lugar sin apuro de ningún tipo.
La paradoja se daba en que a pocos metros del lugar, efectivos policiales en los controles indagaban a los conductores sobre los “motivos de circulación” haciendo cumplir el DNU en un caso, con un flagrante incumplimiento a pocos metros.
Detectada esta situación, y ante el comentario a los manifestantes sobre su incumplimiento y la ausencia de reprensión alguna desde el Estado, la respuesta fue contundente, “si los mismos policías nos dicen que ya están podridos de todo esto”, comentó uno de los manifestantes.