La búsqueda de la aeronave militar chilena con 38 personas a bordo, que desapareció el lunes cuando sobrevolaba el océano austral rumbo a la Antártida, continúa sin arrojar resultados, pese a un gran despliegue en la región.

Cerca de 15 aviones y cinco barcos de distinto tamaño y nacionalidades participaban de la operación de búsqueda del Hércules C-130 de la Fuerza Aérea de Chile (FACH), dijo este miércoles en rueda de prensa Eduardo Mosqueira, comandante en jefe de la IV brigada aérea.

Como las condiciones climáticas y la visibilidad mejoraron en relación al martes, las labores de búsqueda se ampliaron a un área mayor a la zona en la que se perdió el contacto con el avión. Se trata de una superficie total de 960 km², de acuerdo a la FACH.

“Tenemos cuatro cuadrantes de búsqueda. Cada uno son aproximadamente unos 240 kilómetros por unos 120. Estamos hablando de una distancia entre Santiago y Chillán, y el ancho de Chile”, dijo Mosqueira a periodistas en la base aérea de Chabunco, en la ciudad de Punta Arenas, a unos 3.000 km al sur de Santiago.

En las pesquisas participan fuerzas militares de Chile, Argentina, Uruguay, Brasil y Estados Unidos. En total hay 285 personas de la FACH, 286 de la marina chilena y 69 de medios internacionales.

“Toda la FACH y las Fuerzas Armadas estamos colocando todo nuestro apoyo y esfuerzo para buscar al C-130 desaparecido”, agregó el comandante.

El avión militar, con 38 personas a bordo —21 pasajeros y 17 tripulantes— despegó a las 16.55 (19.55 GMT) del lunes desde Punta Arenas, en el extremo austral de Chile, rumbo a la base Eduardo Frei en la Antártida, y “perdió comunicación radial” a las 18.13 (21.13 GMT), según la FACH. La aeronave fue declarada “siniestrada” tras siete horas de ocurrido el incidente.

Casi dos días después de activado el operativo de búsqueda, no se había encontrado ningún rastro de la aeronave, una de las más seguras en operaciones en la Fuerza Aérea de Chile.

La aeronave perdió comunicación cuando sobrevolaba el mar de Drake, una de las zonas más tormentosa para la navegación, que une el continente sudamericano con la Antártida.

El avión tenía como misión cumplir tareas de apoyo logístico en la base Eduardo Frei, la más grande de Chile en la Antártida, para la revisión del oleoducto flotante de abastecimiento de combustible de la base y realizar tratamiento anticorrosivo de las instalaciones.