Se trata del juicio que esta semana se inició contra Cristian Espindola de 37 detenido el año pasado cuando merodeaba a las víctimas. Había sido denunciado en 2018 pero su causa cayó en el juzgado del ex juez Daniel Cesari Hernández donde sucedieron todo tipo de barbaridades judiciales con anuencia del Superior Tribunal de Justicia.

El juicio oral a puertas cerradas que se desarrolla en el Tribunal de Juicio en Campamento YPF pasó a un cuarto intermedio hasta el lunes para los alegatos de las partes, tanto la fiscalía representada por la Dra. Mónica Macri como la defensa ejercida por la Dra. Lorena Nebreda.

El caso que se sigue contra este sujeto se referencia a muchos años atrás en que Espíndola con 22 años inició una relación de pareja con su ex, cuando esta tenía tan solo 13 años en la provincia de Misiones, lo que ya de por sí constituye un “abuso sexual”.

En 2016 vinieron a Río Grande por mejorar su situación laboral y allí fue denunciado en 2018 por el abuso sexual de dos menores de 3 y 8 años de edad.

La denuncia en ese entonces recayó en el juzgado del Dr. Daniel Cesari Hernández, juez hoy renunciado ante la posibilidad de destitución, el cual lo mantuvo en libertad pese a la gravedad de las acusaciones.

No fue hasta el 2022 que la fiscal de la causa en ese entonces tomó conocimiento que Espíndola merodeaba a sus víctimas, pidiendo su inmediata detención, lo que permitió sustanciar el juicio este año, tras más de 5 años de proceso judicial.

El lunes serán los alegatos y la semana venidera Espíndola finalmente obtendrá un veredicto en torno a su situación judicial que mantuvo tantos años desprotegidas a las denunciantes.