A partir de los incidentes ocurridos en el día de ayer en la zona de Andorra, el secretario de Gobierno del municipio, Pablo García, señaló que “desde la Municipalidad se venía haciendo un relevamiento previo con la secretaría de Hábitat y las áreas de Desarrollo Social para constatar la situación de los ocupantes y poder brindar alternativas a esta ocupación ilegal, ya que no están dadas las condiciones en esa zona, por la falta de servicios básico como agua, cloaca y gas, para que se instale ninguna familia”.

“Luego de varias gestiones para que la familia abandone el lugar, y para lo cual se le habría ofrecido un lugar en el albergue municipal, los ocupantes decidieron atacar de forma violenta a los policías, lo cual demoró el desalojo”, dijo respecto de los incidentes.

Ante estas complicaciones refirió que “la ciudad necesita una respuesta integral y conjunta entre todas las áreas involucradas para poder hacer frente a estas ocupaciones irregulares, que lo único que logran es demorar el proceso de regularización en marcha. Nuestra filosofía de gobierno es que la ciudad es una sola y no puede haber división entre los de arriba y los de abajo, pero para lograr eso tenemos que avanzar en dos frentes: El primero es la regularización de las tierras, proceso en el que venimos trabajando. El segundo es involucrar a todos los actores: el municipio, la provincia, las fuerzas de seguridad, la justicia, las áreas sociales y de hábitat; en un protocolo de intervención en el que todas las partes nos pongamos de acuerdo”.

En ese sentido señaló que se presentará un proyecto “que defina claramente un protocolo de acciones para evitar que se sigan dando este tipo de situaciones”, dijo respecto de un proyecto de ordenanza a elevar al Concejo Deliberante de la ciudad.

“Lo someteremos también al consenso con el Poder Judicial y con el Gobierno de la Provincia”, dijo, anunciando asimismo que se dispondrá de un refuerzo en materia de seguridad en la zona, con mayores controles en el territorio para evitar nuevas intrusiones.