Así lo señaló el director del servicio, Claudio Cánovas, quien se refirió a la situación que se vive por estos días con mujeres recluidas en comisarías, lo que generó la presentación de hábeas corpus.

La alcaidía de mujeres funcionaba en condiciones edilicias muy precarias y riesgosas, por lo que se decidió encarar una obra de refacción integral; “estamos ampliando la alcaidía de Ushuaia que hace años no tiene reparaciones, la empresa a cargo tiene un plazo de obra de 60 días, la obra está avanzada, se amplían habitaciones, se cambia el piso, la calefacción con radiadores y eso va a quedar bárbaro”, dijo Claudio Cánovas.

“Nosotros explicamos a todas las detenidas por que van a estar alojadas en comisarías, y les pedimos un esfuerzo por este tiempo y que esto va a mejorar sus condiciones de detención, por lo que esperamos normalizar todo a finales de agosto”, agregó.

“No tenemos otra solución, pero es algo temporal para una solución definitiva del problema”, concluyó.

Definen proyecto carcelario para Ushuaia

Entretanto en cuanto a la Unidad de Detención 1 para varones, “estamos superpoblados, tenemos 118 detenidos en Río Grande, construimos la Casa de Admisión y estamos a punto de inaugurar el pabellón colectivo que permitirá ampliar de 20 a 25 internos, pero igualmente tenemos dispersos a los presos que tenemos para que haya una buena convivencia”.

La semana pasada se recibió del ministerio de Justicia de la Nación el croquis o proyecto para llevar adelante en Ushuaia el proyecto de la segunda cárcel, “estamos en comunicación y la próxima semana coordinaremos una visita a la ciudad para dejar el proyecto ejecutivo y que el día de mañana se licite la obra, de 150 plazas, similar a la de Río Grande pero con más capacidad”, concluyó Cánovas.