Se trata del ex sacerdote Cristián Vázquez condenado y detenido por tres episodios de abuso sexual a una menor entre 2012 y 2013.

En 2016, la familia realizó la denuncia a raíz de que la menor contó lo sucedido en terapia psicológica y a sus amigos.

En 2019, el Tribunal de Juicio Oral condenó a Vázquez a la pena de 11 años de prisión , ante la cual su defensa fue en casación ante el Superior Tribunal de Justicia. 

Luego del juicio y la condena, la defensa del ex sacerdote tuvo una última instancia de apelación, sin embargo el máximo tribunal provincial lo rechazó y confirmó la sentencia dictada.