El presidente de la Caja, el contador Leonardo Gómez reconoció que el año pasado a causa de la pandemia “no se incrementaron la cantidad de beneficios como se había pautado por las limitaciones en los trámites”, dijo, agregando que “se están planificando mejoras para modernizarnos y acelerar los tiempos con mejores respuestas a la gente”.

El presupuesto en haberes jubilatorios para este año “se incrementó a 8 mil millones de pesos de los 6 mil millones estipulados para el 2020, la proyección indica un incremento de la mano de la movilidad, a mitad de año andaremos por los 7 mil millones y terminaremos en ese número el 2021”.

Gómez aseguró que “las herramientas de la ley de emergencia no fue necesario acudir a una ayuda necesaria, todo se pudo solventar con los aportes y contribuciones”, pero agregó que la actual situación es de “un equilibrio delicado”.

“preocupa la proyección a futuro donde uno no ve un gran incremento de personal en el Estado, ya que nuestros ingresos dependen de esos aportes y contribuciones, hoy estamos en proporción de 3 activos por pasivo y en ese decrecimiento corre riesgo el sostenimiento del sistema”, graficó.

En ese sentido la representante de los Pasivos, Patricia Blanco, manifestó su preocupación por la situación y aseguró que “tenemos que pensar en todos los activos que vienen atrás, hoy somos 7 mil beneficiarios entre jubilados y pensionados, hay gran demanda de trámites y este año se va a realizar un estudio actuarial y estamos a la espera de los resultados para ver que se va a proyectar”.