Unas 20 hectáreas de bosques pertenecientes a la reserva Selk’nam fueron afectadas por el fuego en el incendio originado en el aserradero de Lenga Patagonia.

“Esta empresa prendió fuego cuando las condiciones del viento indicaban que era peligroso y pusieron en riesgo no solo el bosque, sino también la vida y las viviendas de toda la gente de la zona. Esta actitud irresponsable tiene que tener un castigo ejemplar y los controles deben ser más exigentes”, dijo el presidente de la comunidad Rafaela Ishton, Rubén Maldonado.

Maldonado señaló que “el Estado provincial ha repartido muchos millones que recibió del Estado nacional por la ley de bosques 26331. Sin embargo la comunidad nunca pudo acceder a un proyecto para formular su plan de manejo integral comunitario dentro de la reserva porque la directora de Pueblos Originarios de la provincia, Verónica Peralta, cajoneó el proyecto”, denunció.

“Vamos a ir con todo el peso de la ley porque el daño que nos hicieron en estos cuatro años es millonario, y con el incendio de estas 20Ha con más razón. El gobierno permite que gente que viene de cualquier lado explote, pero a la comunidad indígena la dejaron afuera. Igual que con la obra del corredor del Beagle, que no se hizo la consulta previa e informada. Y ni qué hablar de la antena satelital que pusieron a en la zona de la reserva. Tampoco nos consultaron y hoy tenemos un gravísimo problema porque por las ondas que emite esa antena, desaparecieron las aves de la reserva. El ruido que hace, es insoportable”, concluyó.