Las pujas y negociaciones este año no están ausentes en la definición de autoridades del Concejo Deliberante, que deberán ser proclamadas el próximo 15 de febrero en la apertura de Sesiones Ordinarias. La continuidad de la presidencia de Alejandro Nogar cuenta con el aval político de la Municipalidad, pero un aliado político se transformó en un adversario inesperado.

El próximo 15 de febrero se producirá la apertura de Sesiones Ordinarias del Concejo Deliberante, para lo cual el cuerpo ya deberá tener definidas sus autoridades.

El primer año de gestión de este cuerpo de concejales tuvo en su acto de asunción una elección de autoridades teñida de situaciones irregulares e increíbles, hasta la definición de un presidente que duró poco tiempo.

En este año la presidencia de Alejandro Nogar parecería llegar con relativa solidez, con el visto bueno desde el Ejecutivo Municipal, y el férreo acompañamiento de las ediles de extracción justicialista; Verónica González y Miriam “Laly” Mora.

En esta oportunidad la sorpresa la aporta el cuarto aliado de esta “mayoría automática”, el concejal radical Paulino Rossi que pese a su ausencia ha tendido un manto de dudas en torno al acompañamiento a la continuidad de Nogar.

Y resulta que Rossi habría intentado reflotar la presidencia para el concejal Raúl Von der Thusen, en una altyernativa planteada que contaría con el apoyo de la ausente concejal Laura Colazo, quien adheriría por simple osmosis opositor al Ejecutivo Municipal.

En esta intentona unos meses atrás habría sido viable el voto de María Eugenia Duré, la edil del Frente para la Victoria con la que los ediles de la mayoría casi no mantienen contacto institucional.

Para este intento conspira que hoy Duré forma parte de un pacto político entre los Ejecutivos de Melella y Walter Vuoto, a quien Duré responde políticamente, por lo que resultaría una sorpresa que “sacara los pies del plato”, en una terminología de frecuente uso en el ámbito político.

Más allá de esto Duré ya habría planteado a su referente Vuoto su “autonomía” en cuestiones que atañen a su función de concejal, por lo que deja el manto de duda el alcance precisamente que la edil dará a ese “libre albedrío” en este tipo de cuestiones que atañen a su desempeño en la banca.

El martes los ediles se reunirán en preparatoria para terminar de limar asperezas y definir sus autoridades en el actual período. Es de esperar un manejo institucional mucho más prolijo a como comenzó esta actual gestión.