El siniestro del pasado 28 de diciembre en el supermercado chino desató todo tipo de conjeturas que rápidamente fueron disipadas y tras esto en la jornada de este lunes la Justicia Provincial dispuso la entrega del edificio siniestrado a sus propietarios.

Los peritajes concluyeron que un defecto eléctrico en la instalación sobre la línea de cajas inició el fuego, lo que incluso se pudo observar a través de las cámaras de seguridad, descartando intervención de terceros.

Los damnificados ahora realizarán los trámites de rigor ante el seguro y ahora se abre un paréntesis de incertidumbre para las fuentes laborales, a fin de la evaluación de si se retoma este emprendimiento comercial, la cual sería la intención de los capitales chinos.