Lo afirmó el intendente Martín Perez en el marco del acto por el Día de la Soberanía Nacional. A 177 años de la Batalla de la Vuelta de Obligado, se izó nuevamente la bandera argentina en el emblemático Monumento a los Caídos de Malvinas de la ciudad de Río Grande.
El acto fue encabezado por el gobernador de la provincia, Gustavo Melella, y el intendente Martín Perez, quien en su alocución expresó que “ser la ciudad de la Soberanía no es un eslogan sino el reconocimiento de todo un pueblo del valor geoestratégico de nuestra posición».
El intendente enfatizó que “el pueblo de Río Grande luchó junto a sus combatientes, los abrazó a su regreso y los acompañó desde la primera vigilia. Pero también es un pueblo que comprende la importancia de la industria nacional para sostener la soberanía nacional y el desarrollo de la Argentina”.
En este sentido, Perez sostuvo que «comprender esto es lo que le da también sentido al arraigo de nuestros abuelos y padres en estas tierras. Poblar Tierra del Fuego, hacer patria frente a la costa del Atlántico Sur fue una necesidad histórica de la Nación», y agregó que «hoy tenemos el desafío de proyectar y potenciar esta presencia es desarrollo productivo, tecnológico y logístico».
Por ultimo, enfatizó que «nuestra ciudad es el Polo Industrial más austral del mundo, la ciudad más próxima a nuestra Islas Malvinas, la capital nacional de la vigilia. Defendamos a Río Grande, defendamosla por nuestros abuelos y nuestros hijos, por nuestros héroes de Malvinas”.