La masiva manifestación social con la que paradójicamente cientos de riograndenses rompieron la cuarentena hizo sonar cacerolas y bocinas por todo Río Grande contra la anunciada apertura del aeropuerto.

Este clima de descontento social hizo que el Gobierno solicite a Aerolíneas Argentina la suspensión de los dos vuelos semanales al Aeropuerto de Río Grande y se determinó la contratación de un vuelo sanitario que garantice a la isla la provisión de medicamentos, insumos y profesionales médicos que sea necesario durante el tiempo que dure la cuarentena por la pandemia del COVID-19.

“Es importante que las vecinas y vecinos de la provincia sepan que el pedido a la empresa de bandera de establecer dos vuelos que uniera a Tierra del Fuego con el continente respondía a la necesidad de mantener la conexión aérea en el marco de las acciones operativas decididas para mitigar la propagación del coronavirus”, señaló el Gobierno.

“El temor está presente en todos. Es comprensible. Y nuevamente hemos escuchado el reclamo de los y las vecinas, principalmente de Río Grande, a pesar que ha sido dispuesto un operativo sanitaria riguroso para la llegada de aquellos fueguinos que hoy, con todo derecho, quieren estar en su hogar”, expresó el Gobierno en comunicado oficial.