El Gobierno nacional quitó el subsidio al transporte público de pasajeros, trasladando esa obligación a las provincias y a los gobiernos locales. En el caso de los municipios fueguinos, están buscan el menor impacto en el precio del pasaje.

La situación ha generado mucha inquietud frente al impacto que esta medida podría tener en las ciudades, donde se considera que sin esta ayuda, el precio del boleto hasta podría hasta duplicar su actual valor.

En Ushuaia, en principio, el boleto se estableció en 17 pesos a fin de año antes de la quita del subsidio y, como en todo el país, se espera una nueva consecuencia en el precio del pasaje sea inminente.

En el caso de Río Grande, fuentes municipales indicaron que se está buscando que esto repercuta de la menor manera en el bolsillo del usuario, sosteniendo el valor más bajo de la Patagonia y garantizando la calidad del servicio. Actualmente en la ciudad del norte de la provincia el boleto está en 11 pesos.

“Tenemos el boleto más bajo de la región y queremos seguir así, pero es cierto que tenemos que mantener la calidad de servicio actual. La quita del subsidio nacional es muy fuerte pero vamos a encontrar una salida haciendo todos un esfuerzo”, sostuvo una alta fuente municipal consultada.

La quita de los subsidios al transporte es una de las medidas del gobierno nacional con el propósito de obtener el “déficit cero” comprometido con el Fondo Monetario Nacional y está comenzando a comprometer todo el transporte público en el país.