El intendente de Río Grande, Martín Perez, lamentó que la reciente visita del presidente de la Nación a Tierra del Fuego se haya realizado “sin diálogo con las autoridades de la provincia”, al considerar que el país atraviesa “un momento complejo que requiere consenso y trabajo conjunto”.

“Esperaba que en su visita anuncie la derogación del decreto 333 que daña de manera directa a la industria fueguina y eso no sucedió. También hubiese sido positivo una instancia para poder dialogar sobre el futuro de la provincia y lo que necesita Tierra del Fuego”, sostuvo el jefe comunal en declaraciones a FM Origen.

Perez expresó además su preocupación por el tono de los discursos del mandatario nacional: “Me preocupa que se pueda pasar a una instancia de violencia en Argentina porque el presidente agravió y descalificó a todos aquellos que no están en favor de su discurso, y eso creo que no es bueno para la sociedad”.

En ese sentido, consideró que el Gobierno Nacional “debe sentarse con todos los sectores políticos para sentar una base de diálogo” y construir acuerdos que permitan salir de la crisis.

El intendente también se refirió a las elecciones legislativas del próximo 26 de octubre, destacando la propuesta de Defendamos Tierra Del Fuego como “una alternativa 100% fueguina, sin mandatos nacionales, con senadores y diputados que defiendan de manera prioritaria a nuestra provincia porque es la gran necesidad que hoy tenemos”.

“Queremos que nuestros mejores hombres y mujeres puedan ir al Congreso con una voz clara y proyectar lo mejor para Tierra del Fuego. Estoy convencido de que los problemas de la provincia se solucionan abordándolos desde acá, con compromiso local”, remarcó.

En su recorrida por distintas ciudades de la provincia, Perez analizó además las particularidades de cada una: “Río Grande tiene una particularidad más relacionada a lo industrial, como motor de la actividad económica local. En Tolhuin nos encontramos con un municipio que hace todo lo posible en materia social y productiva para cubrir las necesidades, y en Ushuaia vemos vecinos que quieren recuperar la ciudad, que esté limpia y ordenada. Noté mucho enojo de la gente en relación a la dirigencia política y a las decisiones que no se tomaron”.

Finalmente, el jefe comunal subrayó que las realidades de cada localidad “son muy diferentes”, pero insistió en la necesidad de “proponer una alternativa de futuro y otra forma de hacer las cosas”.