La resolución del juez de instrucción 2, el Dr. Raúl Sahade, resolvió esta noche la causa 38895 por el homicidio de Oscar Vera de 41 años, acaecido el pasado 23 de mayo en una chacra de la margen sur.

El juez procesó por el delito de homicidio a los cuatro imputados; Pabla Elizabeth Romero de 27 años, su hermano, José Santiago Romero de 29 años, y la pareja compuesta por Isabelino Gómez de 40 años y María Bárbara Vargas de 33; todos en calidad de co autores.

Asimismo les aplicó la prisión preventiva, por lo que continuarán detenidos y serán trasladados al Servicio Penitenciario para ser alojados en breve. En el caso de Pabla Romero se ordenaron cuidados especiales en razón de tener un bebé lactante y cursar un embarazo de 4 meses.

Sospechan un romance entre la víctima y una imputada

Los motivos y lo que ocurrió dentro de la chacra es un misterio en razón del silencio guardado por los cuatro imputados, por lo que el fallo se basa en datos y pautas objetivas del caso, habiéndose situado claramente a los 4 detenidos en la escena del crimen.

Todo comienza a desentrañarse a partir del testimonio del remisero que dejó a Vera esa madrugada en la chacra, el cual aseguró que al momento de pagarle el viaje, la víctima en sus últimas horas de vida le señaló que esperaba encontrar sola a Pabla Romero por que ya había viajado en otra oportunidad y estaban sus hermanos, por lo que se había tenido que ir. “Los mato o me matan a mi”, expresó textualmente el chofer que fueron las últimas manifestaciones de Vera.

Segundo después una mujer, se presume Pabla Romero, lo recibió en el exterior de la chacra y esa fue la última visualización del testigo.

A esto se suma otro indicio importante, y es que dos de los detenidos –Gómez y Vargas- se entregaron a la Policía y testificaron inicialmente que hubo una discusión entre Vera y los presentes en razón de este primero querer tener un ambiente de intimidad con la propietaria de la chacra. Allí señalaron que entre los dos hombres lo sacaron, y que José Romero lo apuñaló afuera de la chacra.

Esta versión carece de valor probatorio ya que los imputados lo manifestaron en sede policial y cuando eran considerados potenciales testigos, pero luego pasaron a ser imputados y detenidos, y nunca esto fue ratificado en sede judicial, donde guardaron silencio en su indagatoria.

Las pruebas en contra de los imputados  

Los peritajes en la chacra se encontraron con manchas hemáticas –sangre- fregadas del piso y los ambientes. El reactivo BlueStar permitió recuperar las mismas, e incluso verlas impregnadas en un trapeador y un escobillón, lo que da cuenta del intento de ocultar elementos de prueba del crimen, y eso apunta a la dueña de la casa (Pabla Romero).

Asimismo en relación a los restantes imputados; los tres presentan prendas de vestir con rastros de sangre y diversos golpes e incluso –en el caso de la imputada Vargas- un corte de arma blanca en el rostro.

Esto les da proximidad clara al asesinato, en tiempo y lugar, siendo la principal prueba de cargo en su contra.

La causa aguarda en un futuro próximo los resultados de ADN sobre las prendas de vestir y una cuchilla incautada, a fin de confirmar que se trata de la sangre de la víctima, Oscar Vera.