Las manifestaciones del colectivo feminista se realizaron en la sede de la DIAT en Río Grande, Tolhuin y en el propio edificio del Superior Tribunal de Justicia en Ushuaia.

La propia víctima Carla Kirstein (foto) estuvo presente en la escalinata de acceso al edificio del Superior Tribunal de Justicia, recibiendo el apoyo en relación al caso por el cual denunció por Violencia de Género al funcionario judicial Marcelo Guzmán, quien se desempeñaba como relator del STJ y solo fue suspendido de sus funciones.

El reclamo fue unánime de una reforma judicial alertando que “solo el 50% del personal judicial está capacitado en la Ley Micaela” y dando cuenta de la necesidad de un cambio de paradigma.

En cuanto al caso concreto del caso convocante se reclamó por la actuación judicial y lo que consideraron “la necesidad de una indagatoria y detención inmediata para Marcelo Guzmán por que esto fue un intento de femicidio”.

En el documento aseguraron con preocupación que “hubo abogades (sic) que no quisieron tomar la defensa de Carla para enfrentar a un relator del Superior Tribunal de Justicia”, dando cuenta del real cuadro de situación de lo que significa enfrentar a un funcionario como imputado.

En ese sentido además se reclamó por diversos puntos como la creación de una fiscalía especializada en Violencia de Género y patrocinio legal para víctimas de Violencia de Género.