La increíble petición de un grupo de presos que quisieron ingresar 50 globos al pabellón, fue negada por que los mismo son utilizados para tapar cámaras de vigilancia. Esto generó una revuelta en horario nocturno.

El insólito reclamo de los internos tuvo además el rechazo a sanciones impuestas a algunos presos y la restricción de visitas.

Ante ello los internos del pabellón B decidieron anoche tapar ventanas y accesos al mismo, medida a la que se sumaron desde el pabellón A en el transcurso de la noche.

El Grupo Especial del servicio penitenciario actuó y la situación se controló en pocos minutos sin informarse de heridos o internos sancionados por la situación ocurrida.