Se trata del  documental ‘Siguiendo la Ruta de la Aeroposta -Una historia de Valientes’ realizado por Luis Soler. Fue declarado de Interés Nacional en una ceremonia en la que además se reconoció a los dos últimos pilotos vivos de esta línea aérea comercial germen de Aerolíneas Argentinas, Ronald Scott y Carlos Bilbao,  en la Cámara de Diputados de la Nación.

Luis Soler recorrió distintas ciudades en los tres continentes para realizar este documental. Durante el acto brindó su reconocimiento a todos los que han colaborado con él, como el concejal (mc) y ex intendente y ex diputado nacional Esteban ‘Chiquito’ Martínez; Daniel García, el equipo del Concejo Deliberante, Gastón Toledo Saldaño que acercó datos históricos y a distintas autoridades, especialmente en esta oportunidad a la diputada Carol.

Soler comentó a la audiencia que este documental es la saga del anterior y complementario de un tercero que está en proceso de realización. En esta oportunidad el film también trata del primer accidente aéreo en Río Grande que arrojó varios muertos y asimismo sobre la muestra fotográfica alusiva a la historia de la mítica línea aérea que fue germen de Aerolíneas Argentinas y que durante quince años comunicó a Tierra del Fuego con el Continente. Soler recorrió el norte de África, Europa y Sudamérica recabando datos de la era romántica de la aviación.

El realizador de del documental ‘Siguiendo la Ruta de la Aeroposta’ comentó que tras el primer material “quisimos profundizar en la historia de la aviación comercial de entonces en aviones que hoy son piezas de museo. Era una historia muy rica que se estaba perdiendo y solo quedaba en la memoria de antiguos pobladores y quisimos rescatar esta epopeya de los pilotos que volaban estas máquinas en territorios vírgenes y que según datos históricos, le costó la vida a unos ochenta de ellos”.

Detalló que en este nuevo documental de la saga ‘Siguiendo la Ruta de la Aeroposta’, “le pusimos ‘Una Historia de Valientes’ porque había que serlo para volar en estos aviones sobre desiertos y mares interminables. Era realmente jugarse la vida volar en Aeroposta y ellos lo hacían con todo el placer del mundo en una época en que el romanticismo impregnaba las acciones heroicas de los hombres y no lo hacían por dinero porque no ganaban grandes fortunas ni nada que se les parezca. Era más fácil morir que cobrar”, observó Soler.

En este sentido comentó que “en este documental consultamos a varios especialistas, historiadores y aviadores, que nos van llevando por el hilo conductor cronológico de esa época romántica de la aviación comercial y de todo el esfuerzo que había que hacer para mantener las rutas aéreas, tanto en África, Europa como América Latina y cruzar el océano Atlántico tras la hazaña de Lindberg”.

Agregó que “La Aeroposta dejó muchos nombres ilustres, como Antoine de Saint-Exupéry, a la sazón, creador de ‘El Principito’ y ‘Vuelo Nocturno’; Jean Mermoz, Jean Nöel Boy, Henri Guillaumet, entre tantos otros y los argentinos Próspero Palazzo, Rufino Luro Cambaceres que vino con el padre de ‘Chiquito’ Martínez en el primer vuelo de la ‘Línea’ a la ciudad de Río Grande y a estos grandes aviadores que hoy el parlamento nacional está reconociendo por iniciativa de la Diputada Nacional Analuz Carol y que son Ronald Scott y Carlos Bilbao”.